Receta de Hojaldre de jamón serrano y queso
Hojaldre de jamón y queso bon appétit
Preparación — 10 minutosPRE-CALENTAR el horno a 170 grados Celsius o 340 grados Fahrenheit. Asegúrate de que las láminas de hojaldre ya no están congeladas y colócalas sobre la tabla de cortar grande.CÚBRALAS con una fina capa de compota de higos y reparte un poco de queso rallado por encima. COLOCA encima las lonchas de jamón y añade un poco más de queso rallado si lo deseas. Palitos de jamón y queso de hojaldreFinalización de los palitos de jamón y queso de hojaldre — 10 minutosUtiliza un cuchillo de chef afilado para dividir el hojaldre en 6 tiras. DIBUJALAS con las manos y pásalas a la bandeja del horno forrada con papel vegetal.BÁÑALAS con la clara de huevo y hornéalas durante unos 8 minutos, dependiendo de tu horno. ¡Que aproveche!
Cuadraditos de hojaldre con jamón y queso
Aunque no son empanadas tradicionales porque están hechas con masa de hojaldre, siguen siendo muy populares, sobre todo para el desayuno. Suelen tener forma cuadrada, quizá para distinguirlas de las clásicas empanadas redondas.
La masa ligera y hojaldrada combina a la perfección con el queso fundido y el jamón. Si ha estado recurriendo a empanadillas calientes preparadas comercialmente para desayunos, almuerzos y meriendas rápidos, ésta puede ser su alternativa. Puedes hacer estas empanadas y congelarlas sin hornear, y luego llevarlas directamente del congelador al horno para un rápido bocado caliente.
A tus hijos les encantarán, son sencillas pero deliciosas. Acompáñalas con una gran ensalada verde repleta de verduras para el almuerzo o raciones de fruta fresca para el desayuno. También puedes llevarlas en la bolsa de la compra, ya que están deliciosas tanto calientes como a temperatura ambiente.
La masa de empanada tradicional se elabora con harina y manteca de cerdo y requiere mucho amasado. Puedes hacer estas empanadas de jamón y queso con la masa tradicional si lo prefieres, pero ten en mente la idea de usar hojaldre (casero o comprado) como una alternativa más fácil.
Bolsitas de hojaldre con jamón y queso
¿Te gusta el jamón? ¿Eres de los que siempre están dispuestos a comer un poco? Si es así, estás de suerte, porque queremos darte algunas recetas típicas (y no tan típicas) que te harán disfrutar del jamón serrano como nunca.
¿Estás cansado de la típica pasta a la boloñesa? Prueba de esta manera: elige la pasta que prefieras (espaguetis, tallarines, macarrones…), corta trozos de cebolla, puerro y jamón y cuécelos en una salsa; añádelos a tu pasta y ya está lista para comer. Una receta deliciosa y, además, muy sana.
Seguro que ya la has probado, pero si no lo has hecho, ¡deberías probarla ahora mismo! Esta receta sabe a poco y hace de los guisantes un alimento maravilloso. Para ello, sólo necesitarás guisantes y mezclarlos con trocitos de jamón frito y cebolla. No has probado nada mejor, te lo aseguramos.
En este caso no les vamos a echar azúcar, sino que los vamos a mezclar con jamón. Consiste en comprar masa de hojaldre (o hacerla tú mismo si lo prefieres), cortarla en forma rectangular, colocar encima un trozo de jamón y darle vueltas hasta conseguir la forma de las típicas pajaritas de hojaldre. Ahora sólo tienes que pincelarla con huevo y orégano y meterla en el horno.
Croissants de hojaldre con jamón y queso
Estos bollitos de hojaldre mantecoso están rellenos de espárragos asados, Gouda ahumado y jamón serrano junto con un toque de mostaza con miel. Son perfectos en la mesa del brunch o como aperitivo, almuerzo o incluso una cena ligera. Son muy fáciles de hacer e irresistibles.
El hojaldre funciona mejor cuando está frío. Es más fácil de manejar cuando está frío y se hornea bien y esponjoso cuando está frío. Esto significa que tendrás que trabajar rápido cuando los hagas. A mí me gusta guardar una lámina de hojaldre en la nevera mientras trabajo con la otra. Luego, mientras horneo la primera tanda de paquetes, voy extendiendo y montando el resto. Si está demasiado caliente, será difícil trabajar con él y no se hinchará tanto durante el horneado. Si usas hojaldre congelado, asegúrate de descongelarlo a temperatura de nevera, pero no a temperatura ambiente.
Si va a preparar estos bollos con antelación, hágalos siguiendo las instrucciones de la receta, pero omita el baño de huevo. Colóquelos en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, cúbralos bien con papel film y refrigérelos inmediatamente. Cuando esté listo para hornearlos, retire el envoltorio de plástico, aplique el baño de huevo y hornéelos según las instrucciones de la receta.