Receta de Galletitas de maicena sin manteca
Galletas de maicena
Al principio hablé de harina de maíz además de maicena en esta receta. Sin embargo, esto ha confundido a algunas personas. A partir de ahora, seguiré la nomenclatura estadounidense para esta receta y sólo hablaré de maicena. He actualizado la receta en consecuencia. Lo que crea confusión es que el producto se denomine de forma diferente en los distintos países. En este caso, lo que buscas es el almidón blanco o maicena que se obtiene del grano de maíz.
Para empezar, hay que reunir los ingrediente (La lista completa de ingredientes, incluidas las medidas, figura en la tarjeta de la receta).
Debería quedar una masa blanda que no se pegue a los dedos y a la que puedas dar forma de bola fácilmente. Si la masa se pega, no te asustes. Un poco pegajosa no es un problema, siempre que puedas darle forma de bola. Si está demasiado pegajosa, añade un poco más de maicena hasta que deje de pegarse.
¿Qué ocurre si no se utiliza mantequilla en las galletas?
La mantequilla es un componente clave para la estructura de la galleta y, de lo contrario, probablemente acabaría con una extraña mezcla seca de harina y otros ingredientes secos, junto con posiblemente algunos grumos de huevo, que ni siquiera forma una masa para hornear.
¿Qué hace la maicena a las galletas?
Cuando se añade a recetas de pasteles, galletas, rellenos de tartas y galletas de mantequilla, la maicena ayuda a crear una textura desmenuzable y tierna similar a la de los postres. Comercialmente, la maicena se utiliza a menudo como antiaglomerante.
¿Puedo utilizar maicena en lugar de harina en las galletas?
Sin, sin embargo, las galletas no quedarán igual que si se hubiera utilizado harina. La maicena es conocida por dejar un poco de brillo cuando se utiliza como ingrediente, pero las galletas parecerán mates cuando utilices harina.
Receta de galletas de maicena
Hicimos estos ayer por la noche y esta mañana hemos podido comerlas y estaban deliciosos. Para la receta usamos los siguientes ingredientes:
- 1 taza de maicena (almidón de maíz)
- 1/2 taza de azúcar
- 2 huevos
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- Pizca de sal
Pasos a seguir para hacer las galletas
- Precalentar el horno:
Precalienta tu horno a 180°C (350°F) y forra una bandeja para hornear con papel pergamino o utiliza un tapete de silicona antiadherente.
- Preparar los ingredientes:
Reúne todos los ingredientes necesarios para hacer las galletas de maicena. Tener todo listo te facilitará el proceso de preparación.
- Batir los huevos y el azúcar:
En un tazón grande, bate los huevos y el azúcar hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Puedes hacerlo a mano o con una batidora eléctrica a velocidad baja.
- Agregar la esencia de vainilla:
Incorpora la esencia de vainilla a la mezcla de huevos y azúcar, mezclando bien para distribuir el sabor.
- Agregar la maicena y el polvo de hornear:
Agrega la maicena y el polvo de hornear a la mezcla húmeda. Usa una espátula o cuchara de madera para mezclar hasta que todos los ingredientes estén bien combinados y no queden grumos.
- Formar las galletas:
Con la masa lista, toma pequeñas porciones y forma bolitas del tamaño de una nuez. Colócalas en la bandeja para hornear, dejando espacio entre cada galleta, ya que se expandirán mientras se hornean.
- Hornear las galletas:
Coloca la bandeja en el horno precalentado y hornea las galletas durante aproximadamente 10-12 minutos, o hasta que los bordes estén dorados ligeramente. Las galletas seguirán cocinándose un poco después de sacarlas del horno debido al calor residual.
- Enfriar y servir:
Una vez horneadas, retira las galletas del horno y déjalas enfriar en la bandeja durante unos minutos antes de transferirlas a una rejilla para que se enfríen completamente. Una vez que estén frías, estarán listas para ser disfrutadas.
Disfruta de las deliciosas galletas
Estas galletas de maicena sin manteca y sin harina son una opción deliciosa y más saludable para satisfacer tus antojos de dulces. Puedes guardarlas en un recipiente hermético para mantener su frescura.
¡Que las disfrutes!
