Receta de Ternera a la jardinera para niños

Receta de Ternera a la jardinera para niños

Giardiniera casera fácil

Ingredientes.-6 onzas de carne magra de ternera cocida, 2 onzas de jamón magro cocido o lengua, 1 cucharada sopera de queso rallado, 2 cucharadas soperas de nata, 1 yema de huevo, sal y pimienta, cola de cerdo, 2 ó 3 lb. de espinacas, ½ pinta de buena salsa, glaseado de carne.

Ingredientes: una pechuga de ternera, medio kilo de salchichas, medio kilo de arroz Carolina, una cucharada de queso rallado, medio litro de caldo, una cebolla grande en rodajas, una zanahoria en rodajas, medio nabo pequeño en rodajas, un ramillete de hierbas (perejil, tomillo, laurel), 10 granos de pimienta, pimienta y sal.

Poner la ternera en una cacerola con agua fría hasta cubrirla, llevar a ebullición, espumar bien, añadir las verduras cortadas en dados y los granos de pimienta, salar al gusto, tapar bien y cocer a fuego lento durante 2½ ó 3 horas. Para servir, vierta un poco de salsa sobre la ternera y sirva el resto en una sopera.

Ingredientes.-2 sesos de ternera, ¾ de pinta de salsa de tomate, ¼ de pinta de salsa blanca bien reducida (ver Salsas), 2 cucharadas soperas de nata, 4 onzas de macarrones, 1 cebolla pequeña, 1 cucharada sopera de vinagre, 1 huevo, pan rallado, grasa de freír, sal y pimienta, harina.

Receta de mezcla de jardín en escabeche

Trabajar con lo que tienes. Y maravillarse ante la belleza de las cosas sencillas. Dos lecciones que se aplican a la vida y a la cocina. Nunca antes me había dado cuenta de las muchas y valiosas lecciones de vida que se pueden aprender, o más bien practicar, en la cocina. Trabajar con lo que tienes… bueno, eso nunca ha sido fácil para mí. Hace poco vi esta cita que lo dice todo: “Lo que más nos fastidia en la vida, es la imagen que tenemos en la cabeza de cómo se supone que debe ser”. Es curioso lo bien que se aplica esto a la cocina, ¿verdad?

  Receta de Solomillo de cerdo relleno con salsa

Intentar seguir una receta religiosamente y hacerla coincidir con la imagen perfecta de un libro de cocina nunca parece funcionar. Es una habilidad, ser capaz de confiar en uno mismo lo suficiente como para dejar de lado la imagen de tu cabeza y seguir tu instinto. Si esa habilidad se puede practicar -y enseñar- en el entorno seguro que es la cocina, tanto mejor.

Esta receta surgió de estas dos lecciones. Llevo 15 años en Los Ángeles y nunca había visto guisantes ingleses frescos a la venta. Quizá no estaba mirando. Pero imagínate mi emoción cuando los vi a la venta en el Farmer’s Market la semana pasada. Y la receta más sencilla era la única manera de dejar que su perfección brillara.

Receta de giardiniera de ternera de Al

1880. La cena, siendo la gran comida sólida del día, es un asunto de considerable importancia; y una mesa bien servida es un índice sorprendente de ingenio y recursos humanos. “Su mesa”, dice Lord Byron, al describir una cena ofrecida por Lord y Lady Amundevillo en la Abadía de Norman…

Y luego pasa a observar la curiosa complejidad de los resultados producidos por la astucia humana y la aplicación de la restauración para las modificaciones que se producen en la vida civilizada, uno de los más simples de los instintos primarios:–

  Receta de Zorza

Y bien podemos decir: ¿Quién, en verdad, lo supondría? El abismo que separa al Croata, con un filete bajo la montura, de Alexis Soyer, que prepara una gran cena en el Reform-Club, o incluso de la Sra. Raymond Gray de Thackeray, que da “una pequeña cena” al Sr. Snob (con uno de esos famosos “puddings” suyos), ¡qué abismo!

1881. Que la “ración” de Adán, sin embargo, era “sencilla”, es una cuestión sobre la que tenemos juicios contrarios dados por los poetas. Cuando Rafael hizo aquella memorable visita al Paraíso, de la que Milton nos dice expresamente que lo hizo exactamente a la hora de la cena, Eva parece haber preparado “una pequeña cena” no del todo desprovista de complejidad, y haber añadido helados y perfumes. Nada puede ser más claro que el testimonio del poeta sobre estos puntos:–

Receta de salsa giardiniera cremosa

Se limpia; se espolvorea con sal y comino machacado y así se deja. Al día siguiente se mete en el horno; cuando esté hecho se sazona con pimienta machacada. Una salsa para jabalí: caldo de miel1, vino reducido, vino de pasas.

Triturar pimienta, levístico, orégano, bayas de mirto sin semillas, cilantro, cebollas; añadir miel, vino, caldo y un poco de aceite; calentar y ligar con roux. El jabalí, asado al horno, se enmascara con esta salsa, que se puede utilizar para cualquier tipo de caza asada.1

  Receta de HAMBURGUESAS DE CORDERO

Pimienta, levístico, semillas de apio, menta, tomillo, nueces tostadas, vino, vinagre, caldo y un poco de aceite. Cuando el caldo1 simple esté hirviendo se incorporan las cosas trituradas y se remueve con un ramillete aromático de cebollas y ruda. Si se desea hacer una salsa más rica, ligarla con claras de huevo, removiendo suavemente el huevo líquido. Espolvorear con un poco de pimienta y servir.

Triturar pimienta, levístico, orégano, semilla de apio, raíz de láser, comino, semilla de hinojo, ruda, caldo, vino, vino de pasas; calentar, cuando esté hecho ligar con roux; cubrir la carne con esta salsa de manera que penetre en la carne y servir.