Receta de Carrilleras en salsa de chocolate
Carrilleras de ternera qué parte
Tuve la suerte de comprar las mías a la única explotación comercial de cerdo ibérico de California, Encina Farms. Lo que hace que la carne de cerdo ibérico sea tan apreciada es el hecho de que los cerdos se alimentan de bellotas, lo que confiere a su carne una riqueza increíble. De hecho, en España, ésta es la carne de cerdo que se cura para elaborar el lujoso jamón ibérico.
Las carrilleras de Encina Farms se agotan rápidamente, sobre todo porque sólo hay dos carrilleras por cerdo. Pero si quiere comprar alguna, rellene el formulario de contacto en línea y los propietarios de la granja le avisarán cuando haya carrilleras disponibles o le guardarán algunas.
Merece la pena ese esfuerzo para disfrutar de “Carrilleras de cerdo estofadas en salsa de vino y tomate”. La receta de Chichi Wang, del equipo Serious Eats, consiste simplemente en estofar las carrilleras de cerdo en el horno con cebolla, zanahoria, apio, romero, vino tinto y tomates en conserva.
Las carrilleras de cerdo quedan tiernas y suculentas. Son como el equivalente porcino de las costillas de ternera cocinadas hasta que adquieren una textura satisfactoria. Servir sobre pasta o polenta blanda (mi elección). Es un plato de pura comodidad.
Carrilleras de ternera estofadas
Estas carrilleras de ternera cocinadas a fuego lento se guisan en una hermosa salsa de vino tinto hasta que están tan tiernas que se pueden comer con cuchara. El líquido de cocción de esta receta de carrilleras de ternera está impregnado de un sabor increíble y, cuando se hace puré, se transforma en una salsa espesa y deliciosa.
Acompañada de un cremoso puré de patatas, es un plato muy fácil de preparar, ideal para una cena elegante o una comida abundante entre semana. Prepárelo en la olla de cocción lenta, en la olla a presión o en el horno.
Las carrilleras de ternera son el músculo de la mejilla de las vacas y son un corte de carne muy duro que necesita una cocción larga y lenta para que quede tierno. Absorbe bien los sabores del líquido de cocción y, al cortarla, queda fibrosa, casi como la carne de cerdo desmenuzada.
Pero, a diferencia de la pechuga de ternera (utilizada para el estofado de ternera y el asado), la pechuga de ternera e incluso las costillas de ternera, que tienen partes muy jugosas y otras que (a veces) pueden estar un poco secas, ni una sola parte de la carrillada de ternera está seca. Cada bocado es jugoso y delicioso, ¡y sólo con escribir este post se me hace la boca agua!
A qué saben las carrilleras de ternera
Las carrilleras de cerdo son un corte sublime, delicioso y tierno cuando está bien cocinado; sin huesos, sólo carne deliciosa. No recuerdo no tener carrilleras de cerdo en la carta de mis restaurantes; a los clientes les encantan tanto como a mí.
Poner la cebolla, los dientes de ajo, la zanahoria y el apio en la misma sartén y freír hasta que estén dorados, unos 10 minutos. Añadir las hojas de laurel, el tomillo, las ramitas, las especias secas y los tomates troceados y dejar cocer unos 5 minutos, hasta que el jugo de los tomates se haya reducido.
Hay quien dice que marinar la carne en vino tinto durante 24 horas la ablanda. Yo lo he hecho cientos de veces, pero lo único que puedo decir es que la carne sabe un poco más ácida y tiene un aspecto más morado. Mi sugerencia es que no se moleste.
La temperatura ideal para servir un oloroso es entre 12 y 14ºC. Es el vino más adecuado para acompañar carnes rojas y caza. Combina perfectamente con guisos y estofados de carne; especialmente con carnes gelatinosas como el rabo de toro o la carrillada. Marida a la perfección con setas y quesos bien curados.
Receta fácil de carrilleras de cerdo
No te lo pienses más, estas carrilleras con chocolate y boniato en dos texturas es el plato principal que estabas buscando. No es caro, no es complicado y tiene ese toque especial necesario para servirlo en las fiestas navideñas y que triunfes.
Esta receta tiene muchas cosas buenas, entre ellas, que los ingredientes son bastante baratos y fáciles de encontrar. Otra característica que también me gusta es que se puede hacer con antelación. Sólo tendréis que hornear el crujiente en el último momento pero el resto lo podéis hacer el día anterior y estará aún más rico.
Lo que más puede llamar la atención es el uso del chocolate en un plato de carne pero no es tan raro. Ya lo hemos utilizado en varias recetas similares y, la verdad, su sabor sorprende porque su toque amargo complementa a la perfección.
Carrilleras con chocolate y boniato en dos texturasImprimir recetaGuardar esta receta Inicia sesión para guardarUna receta fácil y económica que puedes hacer, sin complicaciones, para las fiestas navideñas.